"La manipulación en general ha existido mucho antes que Montesinos"

Consciente del importante papel de los medios, el periodista británico Nick Caistor considera que el periodismo es uno de los actores fundamentales de una transición democrática porque tiene el deber de ofrecer información fidedigna.

Si bien reconoce que la autorregulación es la mejor manera de conducir los medios informativos, sostuvo que en el Perú y en América Latina nunca antes se aplicó esta modalidad, que permite asumir un compromiso con la ética profesional.

¿Los medios periodísticos tienen algún rol en una transición democrática?
–Por supuesto, porque el rol fundamental de los medios es informar. En un período de transición, sobre todo, deben ofrecer una información fidedigna y confiable que trate de llegar a la verdad. Por ello, en situaciones políticas difíciles, el periodismo debe tratar de distinguir cuál es la verdad entre todas las versiones que hay.

¿Se contribuye más a la transición siendo un medio periodístico de oposición?
–Cuando hay una transición, todo está en juego. Creo que la responsabilidad de los medios serios es tratar de
distinguir entre los pasos buenos y los pasos malos. Supongo que su función no es simplemente ser oposición al Gobierno, sino de participar en un debate
a b i e rto para encaminarse hacia el futuro.

¿Cuál ha sido la conducta de los medios en las transiciones democráticas de América Latina?
–En Argentina y Chile resultó fundamental el trabajo de la prensa independiente. Cuando hay una situación de
caos e incertidumbre política, son muchas veces los medios los que poseen la memoria histórica. Ellos tienen el papel de recordar el pasado, informar el presente y trazar líneas para el futuro.

Algunos sectores señalan que cierta prensa en el Perú aún es manipulada. ¿Cuál es su evaluación sobre los medios peruanos?
–He visto la prensa escrita y la televisión, y observo que cada medio tiene una posición política. Para mí, como extranjero –y supongo que para los ciudadanos del Perú–, me resulta muy difícil distinguir la verdad en la distorsión política de la noticia.

¿Usted encuentra distorsión política en las noticias?
–Por ejemplo, esta mañana leí dos periódicos que tiene versiones totalmente distintas sobre la misma noticia.
Entonces, como ciudadano, me pregunto cuál es la verdad frente a este hecho.

Por lo tanto, hay distorsión política…
– Yo creo que sí. Cada medio tiene su línea política y no veo que puedan ofrecer una verdad objetiva al lector o televidente.

¿Usted cree que esta situación obedece a intereses netamente políticos o a intereses empresariales de cada medio periodístico?
–No conozco muy bien el lazo de los propietarios de medios con el poder. Imagino que existe alguna relación bastante turbia que, a veces, es netamente política, y que otras veces ocurre simplemente para ganar a sus competidores en el mercado.

¿Cómo se puede solucionar esa distorsión política de los medios para aportar a la transición democrática?
–Podemos hablar de la ética, de las reglas del juego, de tratar de establecer una manera en que los medios tengan un compromiso con la verdad, más allá de quiénes sean sus dueños, más allá de su línea política, para dar una versión fidedigna de la realidad porque los ciudadanos merecen medios claros y transparentes.

¿Para establecer ese compromiso es necesario que los medios se autorregulen o que exista un ente regulador que fije pautas?
–La autorregulación y el establecimiento de un organismo regulador son un tema muy interesante. La experiencia británica, e incluso la europea, demuestran
que la autorregulación funciona muy bien. Para eso, los medios y sus propietarios deben estar muy conscientes de su papel como representantes del público.

¿Usted comparte la idea de establecer un ente regulador de los medios?
–Desde la conducta individual hasta la conducta de los medios, creo que lo mejor es la autorregulación porque así desarrollan el sentido de responsabilidad que cada uno tiene. El problema en el Perú y América Latina es que esa autorregulación no se puede aplicar de un día para otro. Si no existe ahora una autorregulación,¿cómo se puede pedir autorregulación a los medios si nunca se han regulado?

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