En Inglaterra y en la mayoría de los países miembros de la Unión Europea, los medios de comunicación
audiovisuales (públicos y privados) están obligados a guardar el principio de imparcialidad en sus informaciones.

Esto significa que las informaciones deben difundir la versión de cada una de las partes involucradas.

Así lo sostiene Danilo Leonardi, investigador y coordinador de proyectos en el Programa para el Estudio Comparativo del Derecho y de la Política de
los Medios, que forma parte del Centro de Estudios de Sociología y Derecho de la Universidad de Oxford.

La imparcialidad –explica– no es una “igualdad matemática”. Se trata de brindar la oport u n idad
para que se muestren todas las versiones de un hecho.

Es un principio contenido en un código que también contempla otros, como la diversidad, la pluralidad y la calidad de las informaciones.

Al exponer la realidad de la prensa, sostiene que
también existe un órgano regulador de las telecomunicaciones que absorbió los organismos que en el pasado normaban los contenidos de los programas de la televisión y la radio.

Actualmente este órgano recibe quejas, analiza casos y aplica sanciones de ser necesario si se encuentra
que determinado medio de comunicación incurre en falta.

Este mecanismo se está trasladando a la mayoría de los países de la Unión Europea, donde existe la tendencia a crear un órgano que regule los medios.

Prensa escrita
Aclara, sin embargo, que la prensa escrita no está
sujeta a ningún control, pues es posible que un periódico tenga determinada simpatía política.No obstante existe la Comisión de Quejas contra la Prensa.

Si bien no hay control, en Inglaterra los medios escritos se rigen por el código de ética de la prensa, que contiene disposiciones respecto a la exactitud en
la información, la protección de menores, de personas internadas en hospitales y del derecho a la intimidad.

En la mayoría de los países de la Unión Europea ya se instalaron consejos de la prensa, cuya función es velar por el cumplimiento de reglas éticas en medios escritos, y están integrados por personalidades independientes y de la industria periodística.

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