Lima,
set. 16 (ANDINA).- El ex ministro de Energía y Minas,
Carlos Herrera Descalzi, propuso hoy se promueva, en simultáneo,
acelerar la distribución del gas natural en Lima, y una campaña
de divulgación para mostrar que no es lo mismo que gas licuado
de petróleo (GLP).
La aceleración
de la distribución para lograr una rápida masificación,
además, sería muy conveniente para aprovechar al máximo
la diferencia de precios con los demás hidrocarburos, dijo a Andina.
"Cuando
el proyecto del gas se planificó, los precios del petróleo
estaban alrededor de los 24 dólares el barril, y ahora están
por lo menos en este momento por encima de los 40", recordó.
De acuerdo
con estudios de expertos, indicó, se espera que cuando aterricen
los precios internacionales será en el rango de los 35 dólares
barril, que siempre estará muy por encima del gas natural, pero
cuanto antes se aproveche la diferencia de precios será mejor
para todos.
En cuanto
a la posibilidad de que haya quienes intenten adulterar piezas o todo
el sistema de conversión a gas natural, dijo que es un hecho que
se tendrán estos actos ilegales.
"No
podemos ignorar que el Perú tiene gran parte de su economía
puesta en la informalidad, y es previsible que se trate de copiar todo
el circuito en clandestino, o sea no sólo el suministro de gas
natural sino las construcciones de las piezas, y allí es donde
surgen los peligros", anotó.
Un tanque
adulterado o instalado en un taller clandestino podría estallar,
afirmó, e insistió en la urgencia de una campaña
de divulgación fuerte y urgente para que la gente entienda que
el GLP y el gas natural son dos cosas distintas.
"El
gas que se consume actualmente en vehículos y en las casas en
el Perú es un gas distinto que por estar bajo cierta presión
dentro del balón se encuentra en estado líquido, lo que
se percibe fácilmente cuando uno manipula los balones cargados",
explicó.
Se mantiene
líquido porque está a una presión mayor que la atmosférica,
y recién cuando retorna a la presión atmosférica
vuelve a ser un gas.
En cambio
el gas que viene de Camisea, precisó, es en todo momento gas y
para ponerlo en los balones o tanques de los vehículos hay que
someterlo a una enorme presión, la cual requiere recipientes especiales
que la puedan resistir.
"Esa
tremenda presión no podría ser resistida por los tanques
o balones que usa el actual gas licuado de petróleo", insistió.
(FIN)
ACS / RRT - 16/09/04 14:07
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