Lima, may. 04 (ANDINA).-El candidato presidencial del Apra, Alan García, dijo que para la segunda vuelta no pedirá el apoyo de los sectores empresariales y poderes económicos que votaron por Lourdes Flores, y que, por el contrario, su mensaje estará dirigido a los excluidos.

"Sería un triste destino el mío terminar sirviendo de mascarón de proa de intereses económicos, no lo voy a hacer,", declaró a CPN Radio.

García dijo que se niega a ser el "capitán de un cargamontón contra el 30 por ciento de los votos campesinos del Perú" que en la primera vuelta apoyaron a Ollanta Humala.

Manifestó que los excluidos a quienes pretende representar "son aquellos campesinos de Puno que no tienen zapatos, no tienen escuela, no tienen luz ni agua desde hace siglos, quienes por razones étnicas y de repudio votaron por Humala".

Aseguró que en la segunda vuelta el Apra llegará hacia esos sectores con propuestas viables en el tema de agricultura, a través de un mensaje a los más pobres, a los jubilados, a los desempleados y a los pequeños y microempresarios.

En otro momento, Alan García dijo que no se prestará a "cosas versallescas y teatrales" como ir a saludar a su contendor Ollanta Humala, como condición para el debate, porque "sencillamente nadie ha ganado aún".

"Han pasado dos personas a la segunda vuelta, tendría que ir una fila de 21 candidatos a saludar a cada uno. Cuando venga el resultado de la segunda vuelta si me toca perder naturalmente saludaré a quien gane y viceversa", expresó.

Más bien, aprovechó la oportunidad para proponer a Humala a sostener primero un debate entre ellos, y luego dar pase al debate entre los equipos de gobierno y los candidatos a las vicepresidencias.

"Los debates se hacen sin condiciones, cuando se ponen condiciones da la impresión de que quieren que uno diga no, y yo simplemente digo: de acuerdo señor Humala pero le invierto los términos, discutamos usted y yo primero y después los vicepresidentes y los hombres del plan de gobierno", manifestó.

Finalmente, adelantó que en los próximos días presentará a un equipo de economistas y sociólogos "que son relativamente nuevos en la escena política pero que tienen identidad con los objetivos que plantea mi discurso".

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