Lima, ago. 17 (ANDINA).- La Policía Nacional del Perú, por disposición del ministro del Interior, Luis Alva Castro, tendió un puente aéreo entre Lima y la zona afectada por el terremoto y hasta el momento ha transportado más de 50 toneladas de ayuda humanitaria y evacuado heridos.

Esta consiste en víveres no perecibles, arroz, azúcar, aceite, bidones con agua potable y 9 mil frazadas; evacuó además a más de un centenar de heridos que ahora están en hospitales de la capital y transportó a 82 médicos de la Sanidad Policial que actualmente brindan servicio a la población damnificada.

Hoy llegaron a Pisco dos hospitales itinerantes que fueron donados hace 60 días por el gobierno de los Estados Unidos a la PNP y que habían sido instalados en el valle del Huallaga.

Alva Castro dijo que los dos hospitales móviles permanecerán en Pisco mientras sean necesarios, para dar atención médica a la población de esa castigada zona.

Igualmente, la Policía donó un primer lote de 215 ataúdes que servirán para que los deudos puedan dar cristiana sepultura a sus familiares fallecidos como consecuencia del terremoto y, además, de esa manera se evita posibles epidemias.

En las últimas horas también arribó a la zona del desastre un contingente de más de 400 efectivos de la Dirección de Operaciones Especiales (Diroes) para labores de control del orden público, medio centenar de rescatistas y agentes de la Unidad de Policía Canina que tienen la misión de ubicar a posibles sobrevivientes o rescatar cuerpos de los escombros.

También han sido transportados seis peritos de la Policía en identificación, que en estos momentos trabajan arduamente para buscar sobrevivientes y recuperar cuerpos de entre los escombros.

A ellos se suman los efectivos de la Dirección de Policía de Carreteras que resguardan el transporte de ayuda humanitaria por vía terrestre hacia la zona afectada.

Aproximadamente 30 viajes en helicópteros y aviones de la Policía se han realizado en las últimas 72 horas y el titular del Interior anunció que “se seguirán realizando tantos vuelos como sean necesarios para atender a nuestros hermanos que nos necesitan”.

Como también lo hizo en la víspera, Alva Castro estuvo hoy en Pisco, Chincha e Ica, en compañía del director de la PNP, general David Rodríguez; y del director de la VII Dirección Territorial de la Policía, general Octavio Salazar, para conducir personalmente la distribución y entrega de ayuda consistente en víveres, medicamentos, ropa de abrigo, frazadas y, sobre todo, agua potable que escasea en la zona de emergencia.

El titular del Interior, muy temprano, arribó a Ica en helicóptero y con altos mandos policiales procedió a verificar la distribución de ayuda humanitaria en coordinación con las autoridades locales.

“Estamos distribuyendo alimentos, frazadas, agua potable en Comatrana, en Luren, en el jirón Bolívar y en la zona de Los Pollitos, que es un sector muy popular en el cercado de Ica. Estamos descentralizando la ayuda con gran efectividad, la Policia Nacional del Perú está cumpliendo su tarea, su labor con eficacia”, señaló.

Dijo que en cumplimiento de las directivas emitidas por el Presidente Alan García, se trabaja para asegurar el permanente abastecimiento de agua potable en la zona afectada por el terremoto.

“Es importante decir que en el distrito de Parcona ya se restableció el servicio de agua potable y también se ha normalizado el servicio de los pozos tubulares en Vista Alegre, que está ubicado en la margen izquierda del río Ica y comprende 17 pueblos jóvenes que hasta hace unas horas no tenían agua y que ahora ya cuentan con ese servicio básico”, precisó.

Actualmente, agregó, se trabaja para normalizar el servicio de agua potable en la zona de Socorro, en Santa María, y en la zona aledaña al estadio José Picasso Peratta. “Eso es lo más importante en estos momentos: darle agua a las personas damnificadas y en eso estamos trabajando”, puntualizó.

En algunas zonas aisladas de Ica, de otro lado, se reportaron conatos de saqueo y desorden que fueron rápidamente controlados por los efectivos policiales que han sido desplegados para mantener el orden público.

Por el kilómetro 297 de la Panamericana Sur hubo algunos ataques a camiones cargados de víveres. Una situación similar se presentó en el puente San Clemente, por el kilómetro 230 de la misma vía.

Brigadas de la Dirección de Policía de Carreteras (Dirpolcar) se movilizaban permanentemente para sofocar cualquier intento de alterar el orden público y el Mininter indicó que según los últimos reportes recibidos desde la zona indican que el tránsito de vehículos es normal.

(FIN) NDP/DBG