Pisco, ago. 18 (ANDINA)- Cualquier posibilidad de epidemia en la zona de desastre descartó hoy el jefe de Estado, Alan García Pérez, gracias al rápido recojo de restos en las ciudades de Ica, Pisco y Chincha.
"Antes, durante largo tiempo, se dejaba los restos un poco bajo los escombros, pero ahora se ha logrado rápidamente eso y está eliminada la posibilidad de una epidemia, que es lo importante", expresó.
Por ello, destacó la solidaridad demostrada por todos los pobladores que han colaborado con las labores de rescate y remoción de escombros en el sector afectado el miércoles por un movimiento teúrico de 7 grados en la escala de Richter.
Además, resaltó la importante presencia de diversos presidentes regionales que acudieron de inmediato para brindar alimentos, frazadas y ayuda humanitaria para los damnificados.
El jefe de Estado también puso en relieve la colaboración prestada por los gobiernos de Colombia, Bolivia, Chile, Venezuela, Argentina, Estados Unidos, México, entre otros.
Por otro lado, dispuso que el presidente del Consejo de Ministros, Jorge del Castillo y las entidades del gobierno procedan a efectuar compras que le permitan contar con un "stock" que regularice la provisión de alimentos y agua.
"Hasta el momento tenemos asegurada el agua potable con un millón 500 mil litros, y aseguro que nadie morirá de sed o hambre en Pisco", expresó a los periodistas minutos antes de trasladarse a Chincha.
Entre otras acciones, indicó que el Estado ha respondido de inmediato al trasladar en 24 horas a todos los heridos de gravedad a Lima.
De igual forma, resaltó la creación de un sistema de trabajo comunal con el programa Construyendo Perú para ofrecer empleo a los jóvenes en el recojo de escombros.
(FIN) JCP/FPQ
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