Lima, ago. 19 (ANDINA).- Decenas de cajas de alimentos de primera necesidad, agua, ropa y frazadas, fue la primera ayuda que hizo llegar el gobierno nacional a través del Mimdes-Foncodes a las zonas rurales más afectadas por el terremoto, en la provincia de Huaytará, región Huancavelica.

Luego de cuatro días de aislamiento a causa de los constantes derrumbes en las carreteras y el difícil acceso a la zona, recién el domingo 19 se pudo conocer el infortunio y desolación que viven cientos de pobladores de Quito Arma, Motanga, Chocorbo Arma y Huayacondo Arma, que perdieron sus casas y animales, indicó Foncodes .

Señaló que los niños y ancianos fueron las personas más afectadas porque desde el último jueves casi no probaban alimentos, y el sistema de agua potable había colapsado en todo el distrito de Quito Arma.  

Este es el primer lote de alimentos, agua y abrigo, ya que el Gobierno seguirá enviando más ayuda para que la población no padezca de hambre ni sed, dijo el director ejecutivo (e) del Foncodes, Carlos González Taranco, ante los más de 200 pobladores de Quito Arma, que pernoctaban en la plaza principal del lugar.

Cada familia del distrito recibió leche, atún, fideos, arroz, azúcar, aceite, menestras, galletas, bidones de agua, frazadas y ropa. Asimismo, el Indeci instaló carpas en las plazas principales de estos anexos para que la gente no siga durmiendo en la intemperie.

Por su parte, el Ministerio de Salud entregó un lote de medicamentos al puesto de salud de la zona, para controlar los más de veinte casos de IRAS, que afectan a los menores de edad, a consecuencia de las temperaturas que llegan a bajo cero. 

En Huancavelica, los distritos más afectados por el terremoto se ubican en las provincias de Huaytara y Castrovirreyna, siendo el distrito de Quito Arma, el más devastado, pues casi el 90% de las viviendas de material rustico se encuentran inhabitables.

La Institución Educativa Nº 22034 colapsó, al igual que el Colegio Eleodoro Bellido, donde el techo se desplomó y destruyó las únicas cinco computadoras que poseían. Lo mismo sucedió en el Puesto de Salud.

La población del distrito de Quito Arma solicitó con urgencia que se reconstruyan los canales de regadío, pues en los siete anexos no se cuenta con agua y en pocas semanas sus cultivos se secarán y sus animales morirán.

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