Lima, ago. 21 (ANDINA)- El jefe del Comando Conjunto de las Fuerzas Armadas, Jorge Montoya Manrique, negó que haya existido negligencia en la actuación de los militares luego de producirse el terremoto de Pisco y reiteró que por los devastadores efectos de este fenómeno, la comunicación con Lima fue imposible hasta varias horas después de producido el desastre.

Fue al responder los cuestionamientos formulados a las Fuerzas Armadas por no haber empleados sus equipos de comunicación para informar a las autoridades del Ejecutivo sobre la verdadera magnitud del movimiento telúrico.

“No hubo negligencia en las Fuerzas Armadas”, manifestó.

Al respecto, Montoya aseveró que los equipos de comunicación cifrada de las Fuerzas Armadas también quedaron fuera de operatividad debido al terremoto, por lo que no se pudo conocer más rápido la magnitud del desastre natural.

Precisó que inmediatamente después de producido el sismo, los oficiales de la Base Aérea Nº 51 de Pisco, ubicada a escasos 50 metros del mar, tuvieron que evacuar la instalación hacia una zona elevada en previsión de un posible tsunami.

Además, dijo que estos miembros de la Fuerza Aérea del Perú no pudieron establecer ninguna comunicación ya que la base fue inundada por el mar.

Incluso, señaló que en la hipótesis de que Lima hubiera logrado comunicarse con la base de Pisco, el encargado de esta instalación no habría podido informar sobre la magnitud del desastre ya que su prioridad era permanecer en su puesto con la finalidad de garantizar la seguridad de esa dependencia militar.

Aseveró que los helicópteros tampoco pudieron partir desde Lima hasta el amanecer del día siguiente debido a que producto del corte de energía, la pista carecía del sistema que guía al piloto para aterrizar de noche.

Por estas razones, la autoridad militar consideró que en este caso no amerita iniciar una  investigación como demandan algunos sectores.

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