Huancayo, ago. 29 (ANDINA).- Los damnificados de los distritos de Laraos, Carania y Huantán, en la provincia limeña de Yauyos, que fueron afectados por el terremoto del pasado 15 de agosto, recibieron ayuda humanitaria del Programa Nacional de Manejo de Cuencas Hidrográficas y Conservación de Suelos (Pronamachcs) y el Proyecto Especial Pichis Palcazu (PEPP).
El gerente del Pronamachcs-Junín, Ángel Saldaña Gonzales, y representantes del PEPP, arribaron a la zona del desastre con un cargamento de colchones, frazadas, carpas, sacos de arroz y azúcar, cajas de atún, sacos de papa, fideos, toneladas de cítricos provenientes de la selva central y paquetes de galletas de agua.
La ayuda, trasladada en una furgoneta, un tráiler y dos camionetas, fue entregada a las autoridades locales para que éstas se encarguen de su respectiva distribución.
“Estamos atendiendo el llamado que nos hiciera la congresista Nidia Vílchez, quien tiene raíces yauyinas, y del presidente de la República, Alan García Pérez (…) Esperamos atender a otras poblaciones afectadas”, señaló Saldaña Gonzales.
Previa a la entrega, los funcionarios constataron los daños en las viviendas y sobre todo en las instituciones educativas, cuyas estructuras fueron declaradas inhabitables por el desmoronamiento de las columnas de concreto, como es el caso del colegio de nivel secundario en el distrito de Laraos.
Por su parte, el alcalde larauino, Albín Bráñez Huayllullo, aseguró que aún no se puede establecer en cifras monetarias el daño sufrido por el terremoto, pero estimó que el 80 por ciento de las viviendas está derruido y los damnificados oscilan entre 300 a 400 personas.
Tras recibir el apoyo de parte del Pronamachcs y el PEPP, las autoridades de los distritos de Catania, Huantán y Laraos, invocó mayor apoyo de parte del Gobierno Central y sobre todo de los hijos residentes yauyinos en otros departamentos del país.
“La reconstrucción de nuestros pueblos será lenta, pero confiamos en que (los yauyinos que radican en otras partes del país) no nos serán indiferentes”, opinó el teniente gobernador de Laraos, Virgilio Rodríguez.
Dada a la magnitud del siniestro que dejó en estado inhabitable la mayoría de viviendas de Laraos, los pobladores organizados a través de los cuatro cuarteles del distrito, realizan ollas comunes para aplacar el hambre de los damnificados.
A diario se preparan alrededor de 200 a 250 raciones de desayuno, almuerzo y cena, con la ayuda que reciben de parte de las instituciones solidarias.
Las viviendas y otras construcciones del distrito de Laraos fueron seriamente dañadas, debido a que estaban edificadas en base a piedra y barro. Además la población se levantó en una lomada que se habría formado tiempo atrás por el deslizamiento de los cerros aledaños.
(FIN) PTM/JOT
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